A simple vista, una chica normal, estravagante en su forma de vestir puede ser. Con un poco más de profundidad, una muchacha como muchas, nada especial, detesta la adolescencia.
Según afirma, su vida depende de sus amigos y de los comentarios que hacen. Muy cariñosa, aunque celosa con ellos, pero no se culpa más que a ella misma. No tiene el derecho a molestara otros (en especial a quienes ama) con caprichos.
Confundida. No sabe decodificar sus sentimientos, no sabe distinguir en lo que uno quiere, necesita o simplemente desea. Jura no creer en el amor.
Obsesiva hasta el punto de llegar a creer lo que un trozo de vidrio dice. Sabe que está enferma, pero le gusta arreglar las cosas fácil y rápido.
Se odia, tiene un complejo irremediable consigo misma.
Y lo peor, No sabe quien es...
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